El PSOE ha ganado las elecciones, con 123 escaños, lo que abre la vía de los pactos para aglutinar una mayoría. Así, puede permitirse llegar a alianzas tanto con la izquierda como con la derecha.
LA VICTORIA DE LA IZQUIERDA MÁS DE UNA DÉCADA DESPUÉS
Han sido unas elecciones con una participación altísima, superior al 75%, lo que ha generado que los socialistas fueran los más votados en todas las comunidades autónomas salvo en Cataluña, País Vasco, Navarra y Melilla.
El mayor temor de los socialistas era una desmovilización como la que les hizo perder la Junta de Andalucía tras 36 años de Gobiernos ininterrumpidos. Su obsesión era conseguir una gran participación, captando el voto de abstencionistas, nuevos votantes y desencantados de Unidas Podemos y Cs.
De hecho, la última semana centro su campaña en la atención de 800.000 indecisos entre Cs y PSOE y, hasta 300.000 pensionistas que dudaban entre el PP y el PSOE, un trabajo que ha sido recompensado.
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La decisión del presidente del Gobierno de instar la concentración del voto útil en torno a su candidatura, ha finalmente dado sus frutos y le ha dejado un puñado de escaños, que ni sus asesores más optimistas podían imaginar.
Si bien, los milagros no existen y, para poder gobernar deberá llegar a acuerdos y, lo más lógico parece que será sumarse a su socio presupuestario, Unidas Podemos (42 escaños) y al PNV (6), Coalición Canaria (2), Compromís (1) y PRC (1), de tal manera que se situaría a un escaño de la mayoría absoluta sin los independentistas catalanes y se aseguraría seguir siendo el residente en el Palacio de la Moncloa.
Aunque existe la opción de pactar con Ciudadanos (58 escaños) para llegar a la mayoría absoluta, parece bastante imposible, dada la reiterada negación al pacto por parte de Albert Rivera.
En todo caso, tendremos que esperar para ver que pasará.
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de la Redacción
El Parlamento español, el pasado noviembre, poco antes de disolverse, aprobó el artículo 58 bis de la LOREG con motivo de la entrada en vigor del Reglamento Europeo de Protección de Datos que legalizaba, en tanto en cuanto el Tribunal Constitucional no lo pare, el 'spam' político.
Con el nuevo artículo 58 bis, los partidos pueden utilizar medios tecnológicos y datos personales en las actividades electorales, es decir, permite recopilar datos sobre la intención ideológica de los ciudadanos.
Además, las entidades deberán hacer hincapié en todos los procesos legales a su alcance para poder recuperar el dinero y poder paliar las consecuencias, a través de la ejecución de garantías si las hubiera o alcanzando acuerdos con los usuarios, además de incluirlo en el fichero de morosos o de iniciar una reclamación judicial.
Las entidades financieras deberán aplicar estos umbrales y tendrán la obligación de notificar al Banco de España antes del 31 de diciembre de 2019, la fecha exacta en la que empezarán a aplicarlo.
