Una década después, parece que España ha recuperado los 19 millones de cotizantes. En el mes de junio, el número de desempleados inscritos en el Servicio de Empleo Público fue 3.162.162, es decir, casi 90.000 personas menos que el mes anterior.
EL PARO SE REDUCE, PERO NO ES SUFICIENTE
El paro ha bajado de manera exponencial en todas las Comunidades Autónomas.
En junio se firmaron 2.055.762 contratos, de los cuales 192.972 son de carácter indefinido
La recaudación se eleva, habiendo recaudado hasta el mes de mayo la cantidad de 46.554 millones de euros, es decir, un 4,7% más de lo recaudado hace una década en los primeros 5 meses del año.
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Si bien, el año pasado ya se cerró con una recaudación histórica de 108.009 millones de euros y este año se estima superar los 110.000 millones, pero el aumento está por debajo de la subida de casi el 12% de la inflación a lo largo de esta década, según estadísticas del INE.
El problema es que aunque la recaudación se haya alzado, la misma sigue sin ser suficiente para cubrir los costes del sistema, por lo que se continua de tirar de la hucha de las pensiones o de préstamos del Estado para cubrir las prestaciones.
Si se compara lo que aporta cada cotizante, también se ha ganado terreno. En 2008, un cotizante del régimen general aportaba una media de 2.218 euros y un autónomo de 1.276 euros. Este añp, la media asciende a 2.355 y 1.466 euros respectivamente.
Las mujeres comienzan a ganar fuerza, la cifra de mujeres activas ascendiende a máximos históricos. A día de hoy, llegan a 8.779.129 afiliadas, mientras que hace una década eran 8.155.381, es decir, más de 600.000 mujeres más que en el 2.008.
Por el contrario los hombres pasan de 10,864 millones de cotizantes en 2008 a 10,227 este año. Así, han pasado de representar el 57,1% de los afiliados al 53,8%.
La razón de estos resultados, radica por un lado, en la propia inercia de la incorporación de la mujer al mercado laboral y, por otro lado, en la necesidad por la que han atravesado muchas familias, que ha obligado a todos los miembros del hogar a lanzarse a trabajar en tiempos de crisis.
Por desgracias, su mayor peso no se traduce en una mejora de las cifras del desempleo, según los estudios soportan un paro tres puntos mayor que el de los hombres y la brecha salarial va del 14% a un 30%.
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de la Redacción