Parece que la resolución de la ONU se ha convertido en la clave para paralizar los desahucios, se trata de un documento del Comité por los Derechos Económicos, Sociales y Culturales (DESC) por el que se exigen "medidas cautelares", es decir que se suspenda de inmediato un desahucio.

¿LA RESOLUCIÓN DE LA ONU PARALIZA EL DESAHUCIO?

Se trata de un papel que lleva el membrete del Alto Comisionado de Naciones Unidas y desde que empezó a circular entre los movimientos sociales de España está intimidando y haciendo dudar a jueces y policías.

Si bien, en realidad el Comité DESC no es la ONU, sino un comité independiente formado por 18 expertos que supervisa que todos los países que firmaron el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales de 1976 y luego el protocolo opcional en 2008 obedezcan las normas que suscribieron de forma voluntaria.

Eso no quiere decir, que España no esté obligado a escucharle. Pero la verdad es que el comité no ha exigido a España que suspenda el desahucio, sino que proporcione una vivienda alternativa a la familia afectada. El problema es que, al no existir un parque de vivienda social suficiente, el organismo adscrito a la ONU pide que se detenga el desalojo hasta que España sea capaz de proveer un techo digno a los afectados.

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El problema es que varios jueces han comenzado a posicionarse en contra, considerando que el comité no tiene competencias sobre su trabajo y, que lo que pide entra en conflicto directo con nuestra Constitución. El Tribunal Constitucional ha manifestado que no es vinculante y, que no se puedes amparar en que no existen medios para dar una vivienda alternativa a una persona a costa de perjudicar al propietario de la vivienda, que tiene derecho constitucional a una tutela efectiva.

Es decir, un grupo de jueces cada vez más amplio entienden que es el Gobierno y no los propietarios de viviendas los que deben garantizar un techo digno a los afectados, a través de la construcción de nuevos parques de vivienda social.

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de la Redacción

La principal causa de la denegación de créditos en entidades financieras es encontrarse incluido en un fichero de morosos. Se trata de un registro en el que se reflejan los datos de aquellas personas que en teoría han incurrido en algún tipo de impago.

¿CÓMO ACTUAR SI TE HAN INCURRIDO EN ASNEF?

El problema es que no siempre los acreedores comunican la inclusión al deudor y en muchas ocasiones se incumplen los requisitos de inclusión. Es muy importante para salir de estos ficheros, saber cómo funcionan.

Así, los requisitos para que una inclusión en un fichero de morosos sea correcta:

La deuda tiene que ser “cierta, vencida y exigible”, es decir, tiene que ser aceptada y no discutida por parte del consumidor.

Se debe notificar de forma fehaciente al deudor que va a ser incluido en el fichero de morosidad y, con 30 días de antelación a la efectiva inclusión.

Además, la deuda no puede tener una antigüedad mayor de 5 años.

Por ello, el primer paso será verificar que efectivamente nuestros datos han sido incluidos en los ficheros de morosos. En muchas ocasiones, los clientes no son conscientes del tipo de deuda por la que han sido incluidos, ni de quién les ha incluido.

Si quieres saber si te han incluido en asnef, pulsa aquí 

Una vez verifiques que efectivamente apareces incluido en uno de estos ficheros como deudor, habrá que comprobar si realmente has contraído esa deuda o no y, también si existió una comunicación de la inclusión.

Salir del mismo no tiene por qué ser complicado, pero hay que seguir una serie de pasos y ser persistente.

Si la deuda es real, el afectado podrá exigir la supresión de los datos esgrimiendo aquellas razones por las que entiende que deba ser borrado del listado de morosos y alegando el requisito que entiende incumplido. Por supuesto, otra forma de salir del fichero es pagando la deuda, pero esto no siempre es posible.

En caso de no existir la deuda, puedes solicitar la cancelación de los datos y reclamar una indemnización económica por la indebida inclusión. Es importante saber que, junto con la solicitud de cancelación, se deben presentar todos aquellos documentos que acrediten el derecho de cancelación, como el justificante del pago de la deuda, por ejemplo.

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de la Redacción

“No puedo pagar la hipoteca” es una frase que a nadie le gusta pronunciar y, que significa que te encuentras en una situación complicada. Para ayudarte a sobrellevar esta situación lo mejor posible, a continuación, te dejamos algunos consejos de cómo proceder cuando te encuentras en dicha situación.

COMO ACTUAR CUANDO NO PUEDES PAGAR TU HIPOTECA

Tanto si has tenido un imprevisto o si tu situación ha cambiado de forma repentina y, has sido incapaz de preverlo, lo más importante es que tomes cartas en el asunto lo antes posible, ya que es mucho más fácil buscar una solución antes de que se empiecen a acumular las cuotas impagadas.

Como primer consejo, te propongo acudir al banco y, explicar tu situación con claridad, a fin de llegar a un acuerdo para que el banco no se quede con tu inmueble o que tu deuda no crezca de forma desmesurada.

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Así para evitar el impago se suelen plantear tres opciones:

1. Puedes alargar el plazo de amortización para reducir la cuota mensual que pagas.

2. Pedir una carencia de la hipoteca total o parcial, es decir, solicitar al banco que nos permita no pagar las cuotas durante un tiempo o abonar solo la parte de los intereses de forma temporal.

3. Negociar una reunificación de deudas si las has acumulado y así pagar una única cuota más reducida.

Ten en cuenta que las dos primeras opciones suponen un encarecimiento de la hipoteca por medio de los intereses.

Una segunda opción, puede ser vender la casa, aunque no sea una solución deseable, puede ser la solución. Si bien, es una solución que deberás pensar bien, ya que una vez que hayas vendido el inmueble y pagado tu hipoteca actual, tendrás que encontrar un nuevo hogar.

Otra solución puede ser solicitar una dación en pago, que es una alternativa que nos permite entregar al banco la vivienda hipotecada para saldar la deuda, si bien, no se recupera el dinero que ya has devuelto al banco ni tampoco tendrás que seguir pagando las cuotas mensuales. Es una posibilidad de evitar la ejecución hipotecaria.

La dación en pago tiene tres ventajas: la deuda queda saldada; te abre la puerta a negociar otras alternativas de pago o un alquiler social para seguir en la vivienda durante un tiempo; y te ahorras el proceso judicial de una ejecución hipotecaria.

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