Gracias al desarrollo de las nuevas tecnologías, cada vez hay más opciones y es más fácil intercambiar y enviar dinero, sobre todo en el ámbito internacional.
HACER UNA TRANSFERENCIA INTERNACIONAL, NO ES SÓLO COSA DE RICOS
Que cada día hay más opciones y más posibilidades es un hecho, pero eso no quiere decir que sea un proceso sencillo y menos conocido, sobre todo si se quiere evitar pagar elevadas comisiones que te cobran los bancos.
El problema de este tipo de transferencias es que no es fácil descubrir el precio real del propio envío, ya que muchos costes están ocultos.
Las comisiones que cobran los bancos por este tipo de servicio varían mucho, desde un porcentaje sobre la cantidad que se desea transferir, hasta comisiones ocultas en el tipo de cambio, las aparentes transferencias “gratuitas".
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El tipo de cambio lo marca el mercado, pero eso no significa que ese sea el tipo de cambio que su banco vaya a aplicar. Es muy común el hecho que los bancos varíen a su favor la tasa de cambio oficial y apliquen un cambio que les favorece a ellos y por tanto perjudica al cliente. Este sobreprecio en el cambio puede suponer mucho dinero en el caso de transferencias por elevados importes.
Sin embargo, las nuevas tecnologías han abierto la puerta a nuevas alternativas, cuyo funcionamiento difiere del de los bancos tradicionales y, que no cobran comisiones más allá de llevarse un margen en el tipo de interés.
Una opción muy atractiva es TransferWise, una plataforma que aplica el tipo de cambio real del mercado y, tan sólo cobra una comisión, que avisa de antemano, lo que provoca que los costes sean mucho menores y, sobre todo sabes con antelación el coste de la misma.
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de la Redacción